La angustia reposa en la mañana
cuando por las calles caminas
y revives formas encubiertas
de la vegetación las piedras
la gente la basura el vidrio
los ladrillos y el cemento
Contempla también los árboles
ellos no son indiferentes
aman con apego a los pájaros
que vuelan y regresan a sus ramas
Aléjate del ruido y del aire
contaminado de los carros
así la respiración la sangre
purifica al ritmo de tus pasos
No revistas la indiferencia
que aparentan los peatones
aunque su gracia ignoren
ellos se saben parte del paisaje
Cuando con atención no se miran
ni se reconocen las cosas
el sentido se les niega
y lo que se quiere creer se inventa
Aléjate de la apariencia
y de adivinar lo que se ignora
para no romperse la cabeza
con preguntas y respuestas
Pero eso nada tiene que ver
sólo respira el aire limpio
que aún la ciudad conserva
Comentarios
Publicar un comentario