Mucho más allá de este paisaje de cielo gris encapotado
que cubre la ciudad y limita el horizonte en la montaña
convive la misteriosa presencia de astros y galaxias
expansión caos y orden azaroso en la grandeza sideral
desde donde es imperceptible nuestra tierra
pero forma parte del espacio que habitamos
realidad de la pequeñez humana que limita con la nada
Pero creyéndonos grandes hasta nuestro fin nos ocultamos
sin embargo la muerte llega y yo veo ya como se acerca
en pequeñas cosas que empiezan por ser carencia
y otras más se van agregando hasta llegar a ser
la ausencia de todas las presencias
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