No sé cómo tomo en serio todavía
el absurdo discurrir de mi existencia
De niño el hogar y las costumbres
me fueron imponiendo sus creencias
poco a poco desperté de mi inocencia
Difícil fue aprender que la verdad no existe
que todo cambia o surge de repente
Uno vive en competencia y compromisos
apariencias poco amor mucho egoísmo
Lo bueno y lo malo son juego de barajas
La felicidad es un ensueño y el recorrido
un paisaje de lo bello y lo feo del camino
No sé cómo tomo en serio todavía
el absurdo discurrir de mi existencia
que bonito ese don que os dio Dios de escribir poesía........
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